sábado, 22 de noviembre de 2014

Ni una más.

Dos marcas. Dos labios y una cachetada. Mi cuello y mi cara. Amor y odio. Dos segundos de diferencia. Me rompo.

Ni una más, me repito gritando... Ni una más... Que se vaya. Que no te mire como si fuese un ángel al que manejó el diablo. Que se vaya y no vuelva. No merezco esto. No me merece.

Anabel Vaz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario