Quererte. Quererme. Que me quieras.
Juguemos a eso que no se nos da bien y
tratemos de cogernos de las manos como niños o, mejor, como adultos. Juguemos a querernos en
la calle y en la escuela, en casa, en el
sofá y en la cama. Juguemos a enredarnos, a que mis pelos se despeinen y
dejen de ser normales. Alborotemos el orden de nuestras vidas, vivamos sin
pensar en nosotros mismos, pensemos en el otro y decidamos amarnos.
Roce de dedos, roce de cuerpos,
susurros y suspiros. Decidamos rápido. No pensemos y actuemos.
¿Nos queremos?
No respondas. No lo pienses. Juega y
olvida el resto. Olvídate de ti y de mi, de tu alrededor, de tus miedos, de tus
pensamientos y deseos. Olvídate de todo menos de mi. Juega. Yo juego y me
pierdo.
Me pierdo en ti, tu cuerpo y tus besos.
Anabel
Vaz.